viernes, 10 de octubre de 2008

Receta para la vida


Ingredientes:
Un bol;
Un molde con forma de persona, (tu mismo)
Botes de:
- Inicio;
- Inocencia;
- Curiosidad;
- Travesuras;
- Primeras amistades;
- Desarrollo;
- Rebeldía;
- Cambios;
- Vagueza;
- Actividad;
- Primer amor;
- Madurez;
- Problemas mayores;
- Responsabilidades;
- Trabajo;
- Viajar;
- Experiencia;
- Familia propia;
- Pareja;
- Hobbys;
- Alegría;
- Tristeza;
- Amor;
- Desamores;
- Amigos;
- Traiciones;
- Sueños;
- Decepciones.

Tomamos un bol, y comenzamos a vertir los ingredientes.
Comenzamos con una base de inicio, aderezado con inociencia, curiosidad, travesuras y primeras amistades.
Dejamos reposar durante un leve tiempo, y vertimos desarrollo, con pellizcos de rebeldía, cambios, vagueza, actividad, primer amor.
Mezclamos lentamente, durante apenas unos minutos, y comenzamos a vertir la mezcla de madurez, problemas mayores y responsabilidades.
Aderezamos con los siguientes condimentos a elegir, uno o varios; trabajo, viajar, experiencia, familia propia, pareja, hobbys.
No olvidar echar unos últimos puñados de ingredientes según tu gusto.
Puedes mezclar alegría y tristeza, una dulce y la otra amarga; o amor y desamores, que su sabor perdura en tu memoria; amigos y traiciones, espolvoreando en pequeños pellizcos, sueños y decepciones, dependiendo del esfuerzo con el que lo mezcles, sabrá mejor o peor.

Verter la mezcla en el molde, y dejar reposar, saboreando el olor.
Consumir preferentemente antes de acabar la vida.


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Imagen de http://blasterkid.deviantart.com

jueves, 2 de octubre de 2008

Cambio radical


Si, las apariencias engañan. Y más de lo que se piensa la gente.
En la vida, nunca se sabe si al día siguiente te llevarás un susto y algo pegará un giro radical.

Eso sí, no me quejo. Esto ha ido para bien.